Nunca una hipótesis tuvo tanta fuerza y era tan fácilmente asumible, como aquella que decía que existían millones y millones de ordenadores infectados con pequeños programas que en un día determinado y una hora determinada a la orden de un sencillo código binario se pondrían en funcionamiento todos con un mismo fin.En lugar de ser terrorífica y devastadora la situación se ha convertido en noticia por que han detenido a los cabecillas, a los vampiros que controlaban a esas indefensas máquinas que nacieron para estar a su servicio. La red la había bautizado con el nombre de mariposa, tal vez por la delicadeza y belleza de estos lepidópteros... sea como fuera los súcubos se habían camuflado en la red kademlia bajo atractivas alas y colores, como súcubos acudían cada noche a sus máquinas infectadas para extraer su sangre en forma de banda ancha y conexiones fantasma...
Los íncubos habían tomado los nombres de Netkairo, Ostiator y Johny Loleante... y alquilaban a sus súbditos a otros ciberdelincuentes... no eran vampiros para Blade, eran unos vampiros que controlaban más de 800.000 máquinas. Han sido detenidos y la mariposa atravesada por una aguja entomológica más eficaz que la estaca de madera y que no causa la muerte de los vampiros jefes.
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