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17 de enero de 2009

El prado en Google Earth

Los chicos de Google Earth, ya sabes esa empresa que a diario todos y cada vez más utilizamos sus servicios, pues aunque no lo creas, comienza a ser un gigantesco monstruo mitad filantrópico mitad lucrativo a partes iguales.

Lo de lucrativo te lo imaginas, por que sin publicidad en su buscador sabe como conseguir asociar su marca a eso que en el mundo empresarial se llama confianza en una marca. Y es que todo lo que toca lo convierte en un acierto y un nuevo filón de hacer amigos y dinero.

En cuanto a lo de filantrópico, pues qué queréis que os diga, para mi ver la tierra con esa nitidez desde el espacio, ver el tejado de mi casa, recorrer a vista casi de pájaro las calles imaginadas de El Cairo, o comprobar cuáles eran exactamente mis antípodas... pues no sé, tengo que decir que desde entonces soy suyo y todo lo que haga pues pienso que lo hace pensando en mi.

Os cuento la última, imaginad que vivís en Popayán, ciudad de algo más de 250 mil habitantes que pertenece al departamento del Cauca, estudiáis bellas artes en su facultad, y estáis interesados las obras que el museo madrileño encierra, pues Google ha hecho lo que me parece otra gran obra para la humanidad. Antes de continuar...

¿Sabéis de quien son esos ojos azules que aparecen en la foto?

En este caso los chicos del buscador se han desplazado hasta Madrid con sus cámaras de hacer fotos con una resolución gigantesca y se han dedicado a fotografiar obras de arte, eso en principio no sería sorprendente, pero si ves una de las fotos si te sorprenderás, apreciarás lo que es una obra de arte, entenderás qué puedes sentir cuando el síndrome de Stendhal se apodere de tu cuerpo, comprobarás cómo las lágrimas caen por la mejilla de una desconsolada mujer verás la mirada azulada del caballero de la mano en el pecho, así miles y miles de detalles te sorprenderán.

En 2008, Google fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades. El jurado destacó su "contribución decisiva al progreso de los pueblos, por encima de fronteras ideológicas, económicas, lingüísticas o raciales". Y aquí es donde entra el tema filantrópico.

Gracias a esta empresa la vida al menos en algunos aspectos es más preciosa si cabe.

Aquí puedes consultar la curiosa historia de los chicos de no seas malvado que es el slogan de la marca Google.

Y por último el video del cómo ser rodó todo lo que antes comentaba en El Prado.



2 comentarios:

  1. Los matices, no sabía lo importantes que eran... gracias por mostrármelo.
    Besos de colores

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  2. ahhhhhhhhh, esos matices, pues ahí es donde aparece el arte y donde el alma siente el pellizco de la belleza.

    Besos de colores? ups... sean pues sean

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