Buscar este blog

19 de octubre de 2009

Te doy un caramelo si me sonríes...

Eres único y me sorprendes cada momento que paso contigo,
 pocas personas pueden sorprenderme
y sin embargo tú puedes hacerlo en cuanto te lo propones.
Eres un tesoro de apenas un metro y poco de altura
con una sonrisa grande y directa de las que me gustan,
de las que sacan de mi, toda la humanidad que a veces olvido.
Eres la parte fundamental de mi vida que da sentido a tantas y tantas cosas.
Eres el hombre ideal con quien compartir emociones y sensaciones.
Eres quien acepta cambiarme un caramelo por una sonrisa.
Eres y serás todo por siempre y para siempre.

1 comentario:

  1. La sonrisa de ese pequeño hombrecito que comienza a crecer y a creer será siempre el mejor regalo que la vida te pueda dar.

    Pero tú siempre serás para él ese gigante al que mirar y al que admirar, ese caballero de reluciente armadura que siempre vencerá a todos los dragones que le provoquen miedos y temores.

    Nunca dejes de ofrecerle sonrisas a cambio de caramelos, ni caramelos a cambio de sonrisas.

    Besitos dulces con sabor a piruleta de fresa.

    ResponderEliminar

¿Qué dice tu corazón?